Mañana, 4 de septiembre, se llevará a cabo un juicio oral y público que ha captado la atención de la comunidad artística y del público en general. El juicio determinará la inocencia o culpabilidad del actor y humorista Dave Weil, quien ha sido querellado por el director teatral argentino Santiago Palumbo.
La disputa entre Weil y Palumbo comenzó a tomar forma tras las denuncias públicas realizadas por Weil. El actor acusó a Palumbo de engaños, malos tratos y acoso hacia sus colegas, relacionados con la producción de un espectáculo en el Teatro del Hotel Guaraní, del cual Palumbo es director. Además, este dirige su propia academia teatral.
Weil afirmó que fue sorprendido minutos antes del estreno con un contrato que contenía una cláusula no acordada previamente. Dicha cláusula estipulaba que la producción debía cubrir una penalización de G. 3 millones por función si no se alcanzaba una recaudación mínima, lo que Weil describió como una “trampa” que resultó en pérdidas significativas para él y su equipo.
Estas acusaciones fueron respaldadas por varios miembros de la comunidad teatral, quienes también denunciaron haber sido víctimas de situaciones similares, lo que ha generado un clima de tensión en el sector. Sin embargo, Palumbo respondió a estas acusaciones con una querella por difamación, argumentando que las declaraciones de Weil han dañado su reputación y carrera profesional.
El juicio de mañana será crucial para resolver esta controversia. Si el tribunal falla a favor de Weil, se confirmarán las acusaciones de prácticas desleales en la gestión de producciones teatrales por parte de Palumbo. Por otro lado, si Weil es encontrado culpable de difamación, podría enfrentar sanciones significativas.
Este caso ha puesto en el foco la problemática de los contratos y las condiciones laborales en el ámbito teatral, y su resolución podría tener repercusiones en la forma en que se manejan las producciones teatrales en el país. La comunidad artística espera con gran interés el veredicto, que podría sentar un precedente importante en la industria.
El video que desató la querella sería el siguiente:
