El jueves 16 de octubre, a las 20:00 horas en la Casa 1927, en la ciudad de Asunción, se llevó a cabo la presentación de este dispositivo médico. Al evento asistieron personalidades del entorno sanitario, médicos y cardiólogos de reconocido prestigio, quienes tendrán la oportunidad de compartir con los representantes de la empresa española desarrolladora todas las cuestiones relacionadas con esta innovación mundial.
La compañía paraguaya Nutrilab, distribuidora de productos farmacéuticos y dispositivos médicos, inició hace un año un proyecto de innovación dentro del sector sanitario. Este proyecto lo lleva adelante en colaboración con el holding español CB Business Development, cuya responsable en Sudamérica es la empresaria paraguaya Sady Bazan Díaz de Bedoya. Ella está a cargo de la comercialización y distribución en Sudamérica del primer IVD de diagnóstico rápido capaz de detectar un infarto de miocardio en apenas 10 minutos, utilizando solo dos gotas de sangre del capilar de un dedo.
En los sistemas sanitarios del mundo, se estima que entre un 5% y 20% de las emergencias corresponden a dolores torácicos agudos. De estos casos, solo un 15% resultan ser infartos de miocardio, mientras que un 80% corresponden a otras patologías, como síntomas de ansiedad, dolores musculoesqueléticos o síndromes gastrointestinales, donde no hay riesgo de vida.
Ante esta situación, los doctores enfrentan un reto considerable debido a la dificultad para diferenciar en los momentos previos qué pacientes realmente están sufriendo un infarto. Esto es especialmente complicado cuando las pruebas clínicas no arrojan resultados concluyentes, pero es crucial actuar rápidamente para evitar el daño irreparable al músculo cardíaco.
Ante esta problemática, el equipo de desarrollo hispano-irlandés, formado por Biopanda Reagents y K-mara Healthcare y liderado por el Dr. Miguel Ángel Aranda, apostó por un test de diagnóstico rápido. Este test es capaz de proporcionar un resultado en aquellos casos de dolores torácicos indefinidos, permitiendo a los profesionales sanitarios tomar decisiones rápidas y salvar la vida de los pacientes en peligro, al mismo tiempo que descartan dolores torácicos de origen no coronario que no requieren atención de emergencia.
El desarrollo del Combo Cardio Test (Chest Pain Analyzer) se basa en la importancia de obtener un diagnóstico correcto y precoz. Esto es fundamental para manejar y tomar decisiones posteriores que pueden cambiar el pronóstico del paciente.
Este dispositivo no solo ahorra tiempo vital para salvar la vida de los pacientes en las salas de urgencias y ambulancias, sino que también puede ser utilizado en consultorios médicos que no disponen de equipos avanzados. Con solo un pequeño test y una punción en el dedo, el médico puede determinar si el problema es coronario o no.
El test funciona detectando la aparición de una proteína de rápida manifestación en el torrente sanguíneo, denominada H-FABP. Esta proteína solo es detectable si ha ocurrido un fallo cardíaco en las dos horas previas al evento. Así, si un paciente está sufriendo un inicio de infarto, comienza a liberar esta proteína, permitiendo una intervención rápida y segura.
Además, el test incluye una segunda proteína, Troponina CtnI, que aunque es también temprana, aparece alrededor de las 4 horas posteriores al infarto y permanece en el torrente sanguíneo durante una semana. Esta combinación de proteínas permite obtener información crítica tanto de infartos recientes como de eventos que ocurrieron en la última semana.
Aplicaciones del test
Este test tiene múltiples aplicaciones, entre ellas:
- Uso en urgencias y ambulancias, para que el paciente llegue al hospital con un diagnóstico previo fiable que permita una actuación más rápida.
- Uso en las salas de emergencias hospitalarias, donde se puede realizar el test mientras los pacientes esperan ser atendidos.
- Incorporación en kits médicos para eventos masivos, como competiciones deportivas, maratones, y otros que impliquen grandes esfuerzos físicos.
- Uso en pruebas de esfuerzo para deportistas profesionales, para detectar posibles problemas cardíacos tras el ejercicio.
- Incorporación en kits de auxilio para fuerzas militares desplegadas en lugares remotos o embarcaciones en alta mar, donde el acceso a atención médica es limitado.
- Uso en cuerpos de emergencia como policías, bomberos, etc.
Paraguay será el primer país en Sudamérica en utilizar este test, con la intención de expandirse posteriormente a otros países del continente.